martes, 5 de septiembre de 2017

Con el duelo en la garganta
con el tartamudeo de un niño asustado
broto la hiel, filosa y punzante.

Dejó una herida en el tiempo
una que poco a poco se abría entre la resolana de rutina
una llaga de insertidumbre, miedo y dolor.

Las lunas cambiaron, las estaciones mutaron 
la esperanza envestida de lucha fué consigna de valientes
estuviste en el frente, entre cañonazos atómicos y alquimias mortales

Tu luz jamás se desvaneció, ¡brilló más que nunca!
es una explosión multiverso de sueños, de verdades y sin silencios
un por siempre de encuentros etereos

Te declararón desausiado, te inyectaron temor
te doparon con razón y te consumieron con lástima
y al final, un litro de helado y unos versos del alma de curaron

Te curaste para siempre y nos sanaste a muchos
tu asencia no se siente,...